La Felicidad y la Vida universitaria - 4 Minutos de lectura
Por: Ivanna Lajara
Antes de continuar, vamos a definir la felicidad. Según la investigadora, Sonja Lyumbomirsky, la felicidad es la experiencia de satisfacción o bienestar, combinada con la sensación de que nuestra vida es buena, tiene sentido, y vale la pena. Para algunos filósofos, la felicidad es un estado emocional, o una combinación de varias emociones, que se refleja de manera positiva. Para otros, la felicidad es una responsabilidad individual y es el resultado de la calidad de nuestros pensamientos, nuestra actitud ante la vida, y las decisiones que vamos tomando. Yo, personalmente, conecto con esta última definición.
Según varios estudios, los estudiantes felices tienen más probabilidad de finalizar su carrera, encuentran mejores oportunidades de trabajo, y se sienten más satisfechos con sus resultados profesionales al corto y largo plazo.
Para ser feliz mientras realizas tu carrera universitaria, un primer paso es dedicarte a descubrir y entender cuál es tu propósito. Debes conectar con esa razón “de ser” y “de estar” y entender cuál es la gran visión por la cual te levantas cada mañana a estudiar lo que estás estudiando. Suena cómico, porque nos enseñan a hacer esto cuando vamos a empezar un negocio, pero a nivel personal, debemos definir nuestros valores, misión, y visión y alinearlo a esta etapa universitaria.
A partir de tener un propósito establecido, es vital aprender a gestionar nuestros pensamientos, palabras, y emociones. Si a menudo nos llegan pensamientos como “qué fastidio, mañana tengo clases,” debemos ser proactivos y sustituirlos por “mañana voy a aprender algo nuevo” o “mañana estaré un día más cerca de mi objetivo” y decidir buscar el lado positivo. Nuestros pensamientos se convierten en nuestras palabras, esas palabras generan una reacción en nuestro cuerpo, y bajo ese estado nos relacionamos con nosotros mismos y con los demás.
Este es el segundo paso, gestionar estos recursos internos, porque la voz favorita de nuestro cerebro es la nuestra, y todo lo que pensamos nos afecta, estemos consciente de ello o no. Cuando nuestros pensamientos son negativos, se reflejan en nuestros resultados y nos impedimos ser felices.
Un tercer paso para elevar nuestros niveles de felicidad es utilizar nuestro cuerpo a nuestro favor. Y, ¿qué significa eso? Si has escuchado el efecto del “power pose”, que dice que pararte con la postura de Superman te eleva la confianza en ti mismo, te reduce el estrés, y le manda señales de poder y capacidad a tu cerebro, así mismo hay técnicas para decirle a tu cerebro, “mira, vamos a ser felices, cuento contigo”. Algunos de estos hábitos es sonreír a menudo, practicar en voz alta el agradecimiento, compartir con las personas cercanas tus objetivos, proyectar el éxito que anhelamos alcanzar, y cuidar nuestra salud física con alimentos nutritivos y ejercicio adecuado.
Ser feliz mientras cursamos la carrera universitaria es fundamental, ya que desarrollamos herramientas para nuestro futuro personal y profesional.
La felicidad es un estado que fortalece nuestras capacidades personales y sociales, y por ende nuestra empleabilidad o capacidad de emprender.
Esto quiere decir que, si te comprometes con desarrollar hábitos que promueven tu felicidad ahora que estás en la universidad, es más probable que al momento de terminar y enfrentar los nuevos y más grandes retos que traerá la vida, estarás mejor equipado para el éxito.